Ya sea por una crisis de crecimiento, la falta de resultados, problemas de liderazgo, la necesidad de profesionalizarse o la búsqueda de nuevas alternativas para el negocio, el coaching puede resultar una herramienta para ayudar a las empresas a resolver estas dificultades y aumentar su competitividad, a la vez que contribuye al desarrollo del personal.
• Origen y Definiciones
El coaching es una técnica relativamente nueva. Aplicada desde principios de los ochenta en EE.UU., paulatinamente se fue implementando en Japón y diversos países europeos y en la actualidad se está extendiendo, con gran aceptación, a toda Hispano América.
Cada vez son más las organizaciones que buscan la asistencia de un profesional o coach que actúe como observador externo, para que las ayude a identificar los obstáculos, considere alternativas no contempladas y facilite las estrategias que necesitan para obtener los resultados que no estaban logrando.
El coaching es un acompañamiento que muestra a la empresa como está actuando y la ayuda a mirarse a sí misma y a su entorno desde otro lado. La observación es, precisamente, uno de los ejes del trabajo de coaching. Es en este “acompañamiento”, donde se define, implícitamente, una alianza entre el coach y la organización, un acuerdo entre partes donde se establecen los objetivos a alcanzar, la forma de llevar adelante las tareas, la agenda de trabajo y la evaluación de los resultados.
Actualmente, coaching es mucho más que una herramienta de gestión, es un modo de ser y de hacer cotidianamente, lo que lo convierte en una práctica de valor incalculable para el desarrollo individual y la obtención de metas personales y profesionales.
• Coaching Individual y Grupal
La línea de coaching más extendida en nuestro país es la ontológica, la cual se basa en la premisa de que “para modificar algo en el hacer, hay que cambiar algo en el ser”. En otras palabras, el cambio en la conducta obedece a una transformación de la persona.
El coaching ontológico propone, por tanto, un cambio paradigmático, de allí lo ontológico como creador de un nuevo observador de la realidad, como generador de una nueva manera de ser.
Más específicamente, podría decirse que es una disciplina focalizada en la obtención de resultados.
Produce cambios en el modo de observar la realidad dentro de la organización. Las personas, a través de una forma distinta de comunicarse, de relacionarse, de actuar, irán constituyendo una nueva manera de ser. No se trata de enseñar una nueva técnica. El resultado de la aplicación del coaching ontológico se mide por los resultados obtenidos por la organización.
En el coaching dirigido a organizaciones, en cambio, se trabaja, tanto a nivel individual, como interpersonal y grupal. Los equipos de trabajo, a menudo enfrentan dificultades de comunicación, vínculo, motivación o liderazgo, que obstaculizan la productividad y el bienestar de sus miembros, por lo que la tarea del coach es generar estrategias para desarticularlas. Es habitual escuchar, "para qué voy a ir a otra reunión del equipo si no se hace nada, siempre hay problemas, no podemos crecer ni desarrollarnos, no logramos los objetivos".
El coach es la persona que tiene la posibilidad de darle al equipo una visión distinta. El coach tiene una mirada ampliada que, “regala" al resto, proponiéndole alternativas distintas a las que viene manejando, abriendo el horizonte y mirando más lejos.
A su vez, ayuda a hacer más fácil todo el proceso grupal, tanto en la temática como en la dinámica, aprovechando el potencial de las personas. Habitualmente ocurre que a medida que avanza el trabajo del equipo van surgiendo diversas características de personalidad. Hay personas que tienen más facilidad para imaginar, inventar y crear, en tanto otras tienen un gran poder síntesis y otras, fortalezas para concretar y hacer. El coach ayuda a que esas potencialidades se puedan manifestar y combinarse entre sí.
Tanto el coaching individual como el organizacional, al nutrirse de la ontología del lenguaje, tienen como eje la comunicación. El coach pude ayudar a mejorar las competencias conversacionales, o sea, ser eficientes en la comunicación.
•
Tendencia
El coaching está siendo aplicado cada vez más en empresas y organizaciones de todo tipo. La intervención de un coach profesional, en grupos de trabajo o en trabajo personal sobre los directivos, está transformándose rápidamente en una ventajacompetitiva.
Diversas son las razones por las cuales el coaching está transformando las empresas:
- Focaliza los resultados a lograr.
- Descubre la potencialidad de las personas.
- Facilita que las personas se adapten a los cambios de manera eficaz y eficiente.
- Eleva los estándares al promover el planteo de metas desafiantes y estimula a las personas hacia la obtención de resultados sin precedentes.
- Moviliza los valores centrales y el compromiso de los individuos.
- Permite elaborar un plan de acción en función de los objetivos fijados.
- Favorece el desarrollo de las personas y los equipos.
- Permite integrar procesos y formas de trabajo.
- Contribuye a profesionalizar las estructuras.
- Facilita la construcción de equipos de trabajo. Predispone a sus miembros para la colaboración y la creación de consenso.
- Renueva las relaciones y hace eficaz la comunicación en los grupos humanos.
- Aclara roles y responsabilidades.
- Desarrolla competencias directivas y de liderazgo.
- Resuelve conflictos y dificultades de relación.
- Mejora el clima laboral y aumenta el compromiso.
- Contribuye al bienestar y la calidad de vida del personal.
En el mundo de hoy no se conocen límites técnicos, sino límites paradigmáticos.
Asistimos inertes a muchas de las grandes cosas que nos limitan y no somos capaces de observar por qué tenemos los mismos problemas en forma recurrente. Una visión externa puede facilitar el proceso de análisis y eliminación de las causas que provocan tan indeseable situación. |
